Al atender a un plan de formación en habilidades, consideramos importante hacer la diferenciación entre la formación encaminada a la adquisición de conceptos y el desarrollo de habilidades y competencias personales. En el primer caso, las personas aprendemos en función del grado de dificultad y el nivel motivacional, pudiendo solventar las carencias técnicas a través de cursos puntuales, reuniones o acompañamiento en el puesto de trabajo.
En cambio, en el caso de las habilidades y competencias personales, lo que requerimos es que se produzca un cambio a nivel interno, un cambio en los modelos que tenemos el mundo y en la manera en que nos relacionamos con él. En definitiva, implica un ambio sustancial en la persona, que se produce de forma progresiva, en relación con el entorno, y que quere un periodo más o menos largo de tiempo hasta poder garantizar ue las nuevas conductas y comportamientos han sido interiorizadas. Ello supone un poceso gradual al que atender desde distintas perspectivas formativas: - la organización de acciones formativas encaminadas a comenzar el proceso de ntrenamiento de las habilidades a desarrollar/potenciar.
- acciones formativas de seguimiento y feedback encaminadas a chequear los vances y reforzar el proceso de entrenamiento.
- creación, seguimiento y supervisión de espacios formales de desarrollo e nstauración de las habilidades: dinámicas de grupo, experiencias indoor y outdoor, procesos de coaching (individual y/o grupal), procesos de assesment y realización de pruebas psicotécnicas encaminadas a testear el nivel de desarrollo, tomar el pulso a la organización y el entorno mediante herramientas que permitan contrastar los resultados y avances obtenidos (evaluaciones, feedback 360º...), realización de entrevistas individuales de seguimiento, mentoring ...Cada uno de ellos utiliza herramientas y metodologías adaptadas y diferenciadas aunque el título de la acción formativa sea el mismo. Las diferencias básicas estriban en los diversos grados de vivencia y experimentación de los aprendizajes y la posibilidad de compartirlos con otras personas.
- acciones formativas de seguimiento y feedback encaminadas a chequear los vances y reforzar el proceso de entrenamiento.
- creación, seguimiento y supervisión de espacios formales de desarrollo e nstauración de las habilidades: dinámicas de grupo, experiencias indoor y outdoor, procesos de coaching (individual y/o grupal), procesos de assesment y realización de pruebas psicotécnicas encaminadas a testear el nivel de desarrollo, tomar el pulso a la organización y el entorno mediante herramientas que permitan contrastar los resultados y avances obtenidos (evaluaciones, feedback 360º...), realización de entrevistas individuales de seguimiento, mentoring ...Cada uno de ellos utiliza herramientas y metodologías adaptadas y diferenciadas aunque el título de la acción formativa sea el mismo. Las diferencias básicas estriban en los diversos grados de vivencia y experimentación de los aprendizajes y la posibilidad de compartirlos con otras personas.
Todo proceso de desarrollo de habilidades supone recorrer una trayectoria en la que la persona debe pasar por las diferentes etapas partiendo del análisis de la situación de partida. Cada persona debe decidir qué opción elegir para conseguir que su proceso de entrenamiento sea lo más eficiente posible.
"Leer todo sobre las técnicas de la natación
no supone que sepamos nadar"
No hay comentarios:
Publicar un comentario